Concepto de medio ambiente en la obra de vicente de beauvais

4.1.2. capítulo 8: El éter

Sólo un capítulo dedicado al éter en el que se recoge la información de San Isidoro y Beda, además del libro sobre la naturaleza del mundo.

Tal y como expone Vicente de Beauvais, este concepto queda confuso y, en muchos casos, incorporado al concepto de fuego como última capa del Universo. Ese lugar donde quedan los planetas y las estrellas. Como ya comentamos en el caso de Séneca, son muchos los autores que consideran el fuego y el éter sinónimos, o por lo menos, parte de la misma naturaleza, el cielo.

4.1.3. capítulos 9 al 13: El aire

Tercer elemento aristotélico que cobra un nuevo significado en manos de nuestro enciclopedista. El aire, elemento que abarca la región comprendida entre la superficie terrestre y la luna. Mezcla de tierra, agua y fuego, lo que le confiere cierta densidad, siempre húmedo y cálido. Lo que ahora referimos como el conjunto de gases que forman la atmósfera¹³³, gases, que por la acción de la gravedad quedaron atrapados formando dicha capa protectora. Su estudio viene marcado por unos capítulos trascendentales en nuestra investigación. Lo que en primer lugar se aborda como una mera descripción de propiedades, va lentamente convirtiéndose en un relato de experiencias empíricas que nos demuestran dichas propiedades¹³⁴. El aire estudiado como lo que es, gases que se comportan de una determinada manera y con una naturaleza determinada. Estos capítulos se convierten en un estudio químico de la naturaleza y comportamiento de los gases.

Vicente de Beauvais intenta demostrar, con esas experiencias citadas, la unidad del aire, aunque posteriormente se demostró su múltiple composición¹³⁵ sin echar por tierra esas propiedades ya conocidas de antaño. No era necesaria la unidad para poder comprobar múltiples aspectos de los gases que quedan perfectamente referidos en estos capítulos. Los gases que forma el aire tienen fuerza de atracción entre sus moléculas, causa de muchas de las propiedades señaladas en el texto.

Ya en el capítulo 10 podemos extraer principios básicos de los gases como¹³⁶:

1.- Los gases ocupan todo el volumen disponible del recipiente en el que se encuentran. Se adaptan a la forma y el volumen del recipiente que los contienen.

2.- Se dejan comprimir fácilmente.

3.- Difunden fácilmente.

4.- Se dilatan.

Además, en el análisis de sus propiedades podemos encontrar estudio de variables que afectan a su comportamiento:

1.- Temperatura.

Es proporcional a la energía cinética media de las moléculas del gas. Es decir, a mayor movimiento de sus partículas, mayor será la temperatura del gas.

2.- Presión.

Fuerza ejercida por unidad de área. Esta fuerza actúa de manera uniforme sobre todas las partes del recipiente. La presión atmosférica es la fuerza ejercida por la atmósfera sobre los cuerpos que están en la superficie terrestre. Se origina por el peso del aire que la forma. La presión disminuirá con la altura.

En los fenómenos referidos también aparecen claras referencias al vacío, y la pérdida de oxígeno al consumirse en una combustión. La base química de las sangrías aplicadas a enfermos. Dicho vacío puede considerarse tanto la ausencia total de materia como la condición de una cavidad cerrada donde la presión del aire u otros gases es menor que la atmosférica. Es precisamente esta última la que señala nuestro autor en las experiencias indicadas¹³⁷.

4.1.4. capítulos 14 al 21: El sonido

Numerosos capítulos referidos al estudio del sonido, en su relación directa con el medio natural de propagación, el aire. Incluso en capítulos anteriores ya es mencionado como fenómeno intrínseco al aire, que, además, permite el estudio de ciertas cualidades y características del elemento referido. El sonido se considera, de forma más o menos generalizada y aceptada, un golpe de aire que llega al oído sin interrumpirse. Siguiendo de forma clara la concepción aristotélica, se hace mención al sonido de hecho y al sonido en potencia. No el hecho de poder producir sonido implica que éste se produzca. De forma muy clara se analizan los tres componentes necesarios: lo que hace vibrar, lo que vibra y la vibración.

Actualmente la concepción de sonido ha variado de forma notable en manos de nuevas ciencias como la física de ondas¹³⁸. De forma mucho más general podemos indicar que el sonido es cualquier fenómenos físico que involucre la propagación en forma de ondas elásticas (audibles o no), a través de un medio fluido que esté generando el movimiento vibratorio de un cuerpo. ¿No estamos ante esos tres componentes citados: lo que hace vibrar, lo que vibra y la vibración?

En los capítulos iniciales se hace un resumen simple de las características que deben tener los objetos para poder producir sonido, y las maneras de producir éste. Destacamos las cinco formas enunciadas para producir sonido. En el capítulo 16 añade, de forma sucinta, un pequeño estudio de su propagación y los dos medios en los que se produce. Sólo destacar la mención del aire como naturaleza y medio de propagación, mientras que el agua es citada sólo como medio¹³⁹. Este estudio será desarrollado en capítulos posteriores a partir de textos originarios. Por ello saltamos a los capítulos 19, 20 y 21, que nos permitirá un estudio más intenso y análisis actual.

Es en el capítulo 19 cuando aparecen por primera vez, de la mano de Aristóteles, los términos de sonidos graves y agudos. Estos diferentes sonidos son analizados desde el punto de vista etimológico, en su relación con los sentidos y sus efectos fisiológicos. La relación se establece, no de manera física, conceptual, sino como el propio Aristóteles comenta, a partir de sensaciones táctiles. Para Aristóteles, la diferencia entre sonidos agudos y graves reside en su velocidad o lentitud a la hora de alterar los sentidos. Los agudos agitan mucho los sentidos y es por ello que son capaces de provocar daño. Desarrolla la anatomía humana para explicar la sensación dental que se produce ante determinados sonidos agudos y chirriantes, en los que entra la participación del nervio llamado tangible.

Al final del capítulo 19, y en un intento de explicar de otra manera los tipos de sonido, aparecen mencionados en una suerte de paralelismo con los tipos de colores, los siete sonidos diferentes. Suponemos la referencia a las siete notas musicales.

Para Aristóteles, estos tipos de sonidos se encuadrarían dentro de una de las cuatro cualidades básicas del sonido: la altura la duración, el timbre o color y la intensidad, fuerza o potencia.

Cada cualidad está directamente relacionada con las magnitudes propias de cualquier onda de frecuencia definida: longitud de onda, frecuencia, periodo y amplitud¹⁴⁰.



Ilustración : Magnitudes de onda

Relacionando dichos términos:

CUALIDAD	CARACTERÍSTICA	RANGOS
Altura	Frecuencia de onda	Agudo, medio y grave
Intensidad	Amplitud de onda	Fuerte, débil o suave
Timbre	Armónicos de onda o forma de onda	Fuente emisora del sonido
Duración	Tiempo de vibración	Largo o corto

Tabla .- Cualidades de una onda

Como podemos observar, los agudos y graves formarían parte de los rangos de la altura. Viene determinada por la frecuencia fundamental de las ondas sonoras, medidas en ciclos por segundo o hercios (Hz). Una vibración lenta determina una frecuencia baja, es decir, un sonido grave. Una vibración rápida determina una frecuencia alta, lo que conocemos como sonido agudo. Rapidez o lentitud que ya relaciona Aristóteles con estos dos sonidos.

Ilustración : Distintas frecuencias de ondas.

Para que los humanos podamos percibir un sonido, este debe estar comprendido entre el rango de audición 16 y 20000 Hz. Se le denomina frecuencia audible. Por debajo tenemos los infrasonidos y por encima los ultrasonidos.

Los capítulos 20 y 21 se centran en la propagación del sonido. Citando ya al autor, Aristóteles, vuelven a aparecer los dos medios ya indicados, aire y agua, y vuelve a indicarse la doble naturaleza del aire como fuente y medio y la única naturaleza del agua como medio. Existe una explicación al papel del agua, ya que, en principio, la naturaleza del sonido requeriría la presencia de aire. Y, es que, según el científico, este se encuentra en el agua, aunque en muy baja cantidad. Este es la causa de que el agua difumine y diluya los sonidos. Respecto al aire como naturaleza y medio Aristóteles apunta ciertos datos que sorprenden por su parecido al análisis actual que vamos a realizar. Para este autor es la facilidad que tiene el aire para “romperse” lo que le convierte en canal y materia del sonido. Algún golpe provoca la división del aire, el cual se rompe y produce un movimiento causa del sonido.

Ya hemos indicando que no es sólo en aire y agua, cualquier medio elástico sería factible para la propagación. La propagación del sonido involucra transporte de energía sin transporte de materia, en forma de ondas mecánicas, que se propagan a través de materia sólida, líquida o gaseosa. Como las vibraciones se producen en la misma dirección en la que se propaga el sonido, se trata de una onda longitudinal. Ciertas características de los fluidos y los sólidos influyen en la onda del sonido. Por eso, el sonido se propaga en los sólidos y en los líquidos con mayor rapidez que en los gases¹⁴¹.

Para que el sonido se transmita por el aire (gas) se necesita que las moléculas vibren en torno a sus posiciones de equilibrio. En algunas zonas de las moléculas de aire, al vibrar se juntan (zonas de compresión) y en otras zonas se alejan (zonas de rarefacción), esta alteración de las moléculas del aire es lo que produce el sonido. Tal y como ha explicado Aristóteles unos cuantos siglos antes.



Ilustración : Alteración de las moléculas de aire en la propagación de un sonido.

Al final de este capítulo se aborda, de nuevo, el concepto de vacío. Aunque su existencia absoluta se considera falsa, el término sirve para hacer referencia a tres posibilidades: lugar sin cuerpo, materia sin forma o aire sin sonido.

Como ya hemos indicado en capítulos anteriores, el concepto de vacío es muy amplio, si bien es cierto que en muy pocos casos se considera la ausencia total de materia, tal y como intentó demostrar Aristóteles. El término hace referencia a cierto espacio lleno de gases con una presión total menor que la atmosférica. Cuanto más se disminuya la presión más vacío se conseguirá, pudiendo clasificar el grado de vacío. Respecto al fenómeno estudiado, efectivamente sería imposible en vacío, ya que para que se produzca este es necesario el medio donde se de la vibración.

Los capítulos 17 y 18 están dedicados a dos fenómenos relacionados con el sonido, el eco y el comportamiento de dos sonidos al solaparse en el aire. Resulta destacado el capítulo 18 ya que siguiendo las teorías aristotélicas, se menciona la naturaleza ondulatoria del sonido, y su similitud con las ondas acuáticas. Respecto al estudio del eco, el concepto básico del fenómeno es correcto, aunque los detalles referidos son, en muchos casos, erróneos. Es un fenómeno relacionado con la reflexión del sonido¹⁴², y tal y como se señala en nuestra enciclopedia, esta reflexión se produce siempre que el sonido impacte con una superficie reflectante. En el texto de habla de sonido reflejado, que es lo que se identifica como eco. Para que se produzca el eco se tienen que dar unas condiciones que, serían, la perpendicularidad de la pared sobre la que se produce la reflexión, y la distancia de la pared respecto al foco emisor del sonido¹⁴³. Son, exactamente los elementos indicados como determinantes en la enciclopedia.